Alguien. Alguien con quién hablar, reír, llorar, deprimirte, alegrarte… Alguien a quién abrazar, acariciar, besar, tocar, morder, gustar…
Nadie. El problema es cuando no hay nadie. Nadie con quién hacer nada de eso ni de lo otro.
Lo peor es cuando estás solo, que no hay nadie y buscas desesperadamente a alguien.
Alguien lo es todo, nadie no es nada.
3 comentarios:
Que gran razón oye.
;)
Verdad verdaera.
Publicar un comentario